México destaca como uno de los países con mayor número de seguidores de la National Basketball Association (NBA) fuera de los Estados Unidos. Se vislumbra la posibilidad de que el país cuente con su propio equipo compitiendo en la máxima liga de baloncesto a nivel mundial.
La Ciudad de México se postula como candidata junto con Seattle y Las Vegas para recibir una franquicia de la NBA en caso de una expansión futura de la liga hacia otras ciudades de Norteamérica, aunque este escenario no parece inminente.
Aunque Adam Silver, comisionado de la NBA, ha declarado que no hay planes a corto plazo para expandir la liga, diversos empresarios han contemplado la idea. Incluso LeBron James, estrella de los Lakers, ha expresado su interés en formar parte, junto con un grupo de inversionistas, de una nueva franquicia en Las Vegas.
La Ciudad de México se perfila como una opción ideal para la expansión de la NBA debido a su posición como la quinta ciudad más poblada del mundo, con alrededor de 22 millones de habitantes. Además, ha albergado partidos de la NBA desde 1992 y cuenta con la infraestructura adecuada, lo que haría que los viajes de los equipos visitantes no fueran excesivamente largos.
En el caso de una expansión, los Capitanes de la Ciudad de México, que actualmente compiten en la G-League, surgirían como candidatos principales para representar al país en la liga estadounidense de baloncesto. Aunque no hay planes inmediatos de expansión, Mark Tatum, comisionado adjunto de la NBA, señaló que la Ciudad de México estaría en consideración en el futuro.
Los Capitanes, fundados en 2016 por el empresario mexicano Moisés Cosío, se convirtieron este año en el primer equipo no estadounidense ni canadiense en el sistema NBA. A pesar de que su debut estaba programado para 2020, la pandemia de la COVID-19 lo retrasó.
El equipo, dirigido por el español Ramón Díaz, ha fortalecido su plantilla con jugadores latinos y exNBA, lo que lo posiciona como un competidor sólido. La Arena Ciudad de México, con sus 22,300 asientos, se considera el lugar idóneo para los juegos como local del equipo, con infraestructura de clase mundial.
Aunque la NBA no tiene planes inmediatos de expansión, la Ciudad de México y los Capitanes parecen estar preparados para asumir un papel destacado si la liga decide ampliar sus fronteras en el futuro.