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Mientras Washington queda envuelto en una ola de calor, han surgido datos inquietantes: casi el 90% de los incendios forestales en el estado de Washington han sido provocados por actividades humanas.

Hasta la fecha, este año ya se han consumido alrededor de 110,000 acres en Washington. Según el Centro de Coordinación Interinstitucional del Noroeste (NWCC), únicamente 2,400 acres de incendios han sido originados por impactos de rayos.

Carol Connolly, del NWCC, señaló: «El mensaje más relevante es que las condiciones en esta temporada son cálidas y secas, por lo que cualquier chispa o fuente de ignición podría transformarse en un incendio catastrófico de grandes dimensiones». «No podemos evitar que caigan rayos, pero sí podemos prevenir las fuentes de ignición provocadas por humanos».

El lunes, un incendio en un campamento cerca de South Lake Union aumentó considerablemente su magnitud, lanzando una densa columna de humo negro al cielo. Aunque el fuego, originado dentro de un campamento de personas sin hogar, no es categorizado como un incendio forestal, su rápido crecimiento sirve como recordatorio de cuán urgente es la necesidad de lluvia en todas las zonas de Washington. Ante la ausencia de lluvias y alivio, es necesario extremar las precauciones.

Según Climate Central, en comparación con 1973, en la actualidad ciertas áreas de Washington experimentan el denominado «clima de incendios» más del doble de veces. En otras palabras, se ha incrementado la frecuencia de situaciones calurosas, secas y ventosas. Estos factores de riesgo implican que cualquier chispa tiene el potencial de desencadenar un incendio devastador.

Una advertencia de bandera roja, que entró en vigencia a comienzos de esta semana, aún está activa para las laderas occidentales de las Cascadas hasta altas horas del martes.

Las personas pueden contribuir a prevenir los incendios forestales mediante estrategias sencillas que reducen los riesgos:

  • Evitar encender fuegos al aire libre durante condiciones ventosas, con altas temperaturas o cuando la vegetación esté seca.
  • No realizar asados cerca de la vegetación y evitar desechar brasas calientes de manera inadecuada.
  • Siempre verificar que las cadenas u otras partes metálicas en vehículos o remolques no estén arrastrándose.
  • Evitar estacionar vehículos sobre césped seco.

Fuente: Fox 13 Seattle

Por Wachingon